BIDAIA
Antes de que todo se rompiera, era la novia de Siesta.
Juntos compartían una conexión real en un mundo cada vez más artificial. Inteligente, decidida y con una mirada que atravesaba hasta el alma, Bidaia era mucho más que una chica más en medio del caos tecnológico: era el motor que empujaba a Siesta a seguir adelante.
Pero su historia no es sencilla. Ni acaba donde muchos creen.
Un androide asesino se la lleva por delante. Una muerte injusta, brutal, que marca el inicio del descenso de Siesta. Sin embargo, Bidaia no desaparece del todo. Se convierte en un alma en pena, se resiste a abandonar a Siesta y no cruza las puertas del más allá por amor.
Con el paso del tiempo, Bidaia vuelve. No como un fantasma, sino como un escudo. En los sueños de Siesta, le advierte del guante de los dioses, le empuja a seguir, le guía. Su esencia queda atrapada en el cuerpo artificial de Bobo al cruzar el portal divino, y se transforma en un androide blanco y elegante, que se convierte en la nueva forma de estar junto a su amor. Aunque no sea igual. Aunque ya no sepa del todo quién es.
Bidaia representa muchas cosas: el amor perdido, la esperanza que se niega a morir, y también la ambigüedad de la tecnología. ¿Sigue siendo ella o es otra cosa? ¿Una IA con sus recuerdos, o el alma que logró escapar de la muerte?
Su papel será clave en el destino de Siesta y en el de todo lo que está por venir.
Ya no es solo una chica.
Ahora es un símbolo.
Un escudo.
Y puede que también, un arma.